Joaquín Prado es el seleccionador español sub-20 de baloncesto y, además, ejerce como ayudante de Sergio Scariolo durante la temporada cuando se disputan las ventanas FIBA. El técnico ovetense es uno de los que mejor conoce nuestro baloncesto y, en concreto, las categorías inferiores y las canteras. Prado habló con Legal Sport e intercambió reflexiones sobre la preparación de la Selección y el Mundial de Baloncesto, que compartió para todos los lectores en la primera parte de la entrevista.
Sin embargo, la conversación dio para mucho y se trataron temas que van más allá del deporte profesional o la propia España y su papel en Filipinas, Japón e Indonesia. Joaquín es actualmente el director deportivo del Força Lleida, club en el que ya suma varias temporadas y en el que ha pasado por casi todas las categorías. El seleccionador repasa su trayectoria y aporta su punto de vista sobre cómo lidiar con ciertas situaciones del día a día desde dentro de un club, además de proporcionar valiosos consejos para que los jóvenes entrenadores puedan aplicarlos y mejorar de cara al futuro, sea en el deporte que sea.
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🪨 Una trayectoria labrada piedra a piedra
Joaquín Prado nació en Oviedo en 1976. Aunque no tuvo ninguna figura familiar que le inculcara el amor por el baloncesto llegó a él como una activada para hacer deporte en el colegio o con los amigos de la infancia: «Con diez años empecé a jugar en Asturias al baloncesto y desde muy joven y debido a la relación personal que hice con mi entrenador en el colegio, pues empecé a estar cercano a equipos seniors como la Universidad de Oviedo», explica Joaquín Prado.
Joaquín Prado, durante un tiempo muerto.
Pronto descubrió que los entrenamientos y el baloncesto eran su pasión y siempre estuvo dispuesto a ayudar y a aprender: «Con 17 años ya les ayudaba a entrenar todos los días y comencé como delegado de equipo en un senior y a formarme por mi cuenta con equipitos de minibasket», continúa el seleccionador sub-20. «Al principio lo compaginaba con jugar, hasta que me surgió la posibilidad de ser delegado en la Primera división de baloncesto femenino con la Universidad de Oviedo«, por lo que Prado tuvo ya en sus primeros pasos la oportunidad de entrenar también en femenino.
Joaquín se vio en la encrucijada que a muchos entrenadores profesionales les llega en algún momento: «Vi que como jugador no hubiera tenido el recorrido que me hubiera gustado, por lo que me decidí por entrenar«, comenta en lo que para el fue un golpe de realidad que le ayudó a crecer como entrenador. A partir de aquí su mentalidad siempre fue la de absorber el mayor número de conceptos de las personas que había a su alrededor: «Pasé por prácticamente todas las categorías en Asturias, desde la Liga Femenina hasta la Liga EBA y las inferiores ya fuese como primer entrenador o como ayudante».
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A partir de ahí decidió salir de su zona de confort, primero en Gijón para dar el salto a LEB Oro y después abandonó el Principado para convertir su pasión en su profesión: «En el año 2004 llegué a Gijón como ayudante en LEB Oro y los dos años siguientes, entre 2005 y 2007, fui primer entrenador del equipo», analiza Joaquín sobre su primera experiencia en la segunda división española. Prado estudió la carrera de derecho aunque nunca ejerció debido a que el baloncesto le iba a dar todo: «Salí de Gijón y desde hace 19 años he tenido una trayectoria completamente profesional en el baloncesto. Empecé en Guadalajara, fui asistente en Murcia que estaba en ACB y fue cuando llegué a Lleida».
🏀 Força Lleida, el club de la vida de Joaquín Prado
Joaquín Prado decidió llegar a Lleida por su mujer, que es de allí. En el club catalán pasó cuatro campañas como primer entrenador en LEB Oro antes de marcharse a Navarra o Palencia, pero siempre con la mente puesta en regresar. Desde entonces ejerce como director deportivo y esta campaña cumplirá seis años en el cargo: «Yo diría que somos un club gigantesco. El Força Lleida cuenta con un club profesional en LEB Oro, otro equipo profesional en Liga Femenina 2 y tenemos 29 equipos de cantera entre femenino y masculino con el que aglutinamos a 350 niños y niñas».
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Desde 2014, Joaquín, comparte su trabajo en el Força Lleida con la Selección española. Primero como ayudante y después como seleccionador, sobre lo que profundizamos en la primera parte de la entrevista. «Desde la dirección deportiva me encargo de todo, es cierto que tenemos muy buenos coordinadores que nos ayudan con el trabajo, porque como decía somos uno de los clubes más grandes de Cataluña«.
Joaquín explica también que sin entrenar no haría el trabajo que tiene actualmente. «Una de mis condiciones es que además de la dirección tengo que entrenar. Es algo que me encanta. Estamos ya de pretemporada con el infantil y es posible que me tenga que encargar de algo más porque no hay tantos entrenadores en la zona», cuenta sobre su situación actual.
👪 El papel de las familias en el baloncesto
Pocos entrenadores acumulan la trayectoria de Joaquín Prado, y lo bonito de hablar con alguien de su experiencia es atender a los consejos y sabiduría de una persona que lleva años tratando con las diferentes situaciones que se pueden dar en un club de baloncesto: «Yo tengo 47 años y cuando jugaba todo era muy diferente. Hemos visto un cambio social en los últimos 25 o 30 años que ha afectado a la forma de jugar, entrenar y dirigir un club», introduce el ovetense.
«Mis padres tenían una atención relativa a lo que en aquel momento se entendía como actividades extraescolares y apenas vinieron a verme jugar porque se entendía como algo normal», comenta Joaquín sobre sus inicios. Actualmente, Prado explica como todo ha cambiado: «A día de hoy los padres, o las familias son espectadores de todos los partidos e incluso de muchos de los entrenamientos y eso ocasiona mucho apoyo a los niños y niñas, lo cual es fantástico, pero también genera opiniones y presiones para los jóvenes», analiza Joaquín.
Joaquín es consciente de que las familias son un factor más: «A los padres los necesitamos. Muchos de ellos apoyan y ayudan a los entrenadores y clubes, pero es un reflejo de la sociedad y siempre va a tocar lidiar con algún conflicto«, continua Prado sobre el papel de las familias.
El director deportivo del Força Lleida, que convive con los dos ámbitos del deporte, el profesional y el de formación, cuenta su teoría sobre los factores externos: «Los padres son al baloncesto de inferiores lo que la prensa al baloncesto profesional. Hay que saber convivir con ellos, entenderles y comunicarse para que de este modo puedes aprender, apoyarte y controlar a ese factor externo. En mi opinión, no hay que diferenciar de manera tan marcada el baloncesto en categorías inferiores y en el ámbito profesional», sentencia Joaquín.
Joaquín Prado, junto a uno de los equipos femeninos del Força Lleida.
Con Joaquín Prado tuvimos el placer de tratar una infinidad de temas, como por ejemplo la diferencia entre entrenar en femenino o masculino: «Para mí no existe ninguna más allá del tema físico, pero es que tampoco es lo mismo trabajar el físico con Alberto Díaz que con Willy Hernangómez, por ejemplo», comenta un entrenador con experiencia en ambos vestuarios. El seleccionador dejó muchas perlas de su sabiduría y compartió un rato agradable con Legal Sport.
